Modelo de excelencia Europeo EFQM

Qué es el Modelo de Excelencia Europeo (EFQM)

¿Cómo saber si el modelo de gestión de tu empresa tiene el nivel de calidad al que aspiras? En un escenario tan competitivo como el actual, todas las organizaciones necesitan que sus métodos respondan a las exigencias más elevadas. Pero ¿cómo hacerlo? El Modelo EFQM es la orientación que necesitas.

Porque, cuando ya se está a un nivel alto, no basta con seguir progresando para mejorar: hay que abordar una transformación integral, y hacerlo según los estándares de referencia.

El Modelo Europeo de Excelencia Empresarial es la guía para autoevaluar tu organización y emprender un camino de mejora continua.

 

Cómo transformar la gestión según los estándares europeos: qué es el EFQM

El EFQM es un marco reconocido mundialmente que tiene como objetivo ayudar a que organizaciones y empresas, independientemente de su tamaño o de su condición de públicas o privadas, puedan mejorar su rendimiento y ser sostenibles a largo plazo.

Este modelo de calidad fue creado en los años 80 del siglo pasado por la Fundación Europea para la Gestión de la Calidad, sin ánimo de lucro y establecida en Bruselas. Desde su nacimiento, el espíritu ha sido el de brindar pautas de excelencia empresarial. 

La fundación otorga todos los años el Premio Europeo a la Calidad, dividido en cuatro categorías. Dos de ellas son para entidades privadas y otras para organizaciones sin ánimo de lucro. Y en cada categoría se establece un reconocimiento para grandes organizaciones y otro para las pequeñas y medianas.

Es importante destacar que este modelo no establece una norma de obligado cumplimiento. Su objetivo es proporcionar a las empresas herramientas de autoevaluación, basadas en criterios estandarizados, para que puedan mejorar sus patrones de funcionamiento y gestión interna.

Y es perfectamente compatible con otros estándares, como las normas ISO de calidad empresarial o cualquier otra del sector específico de cada empresa. 

 

Aspirar a la excelencia, un objetivo empresarial también en la logística de almacén

La calidad empresarial debe estar en la agenda de cualquier organización que quiera ser competitiva, en un escenario cada vez más reñido y con más actores a un alto nivel.

Además de ofrecer productos o servicios, es importante aspirar a hacerlo cada día mejor, siguiendo los estándares de calidad que marcan la pauta. 

Estos estándares se pueden aplicar a todos los procedimientos, desde los procesos de producción, la gestión administrativa, los flujos de trabajo, la atención al cliente, el control de calidad, etc.

Cualquier proceso empresarial puede adaptarse progresivamente y evolucionar hacia la excelencia.

Para lograrlo, existen distintas normativas, certificaciones y herramientas de gestión de la calidad. Las ISO, por ejemplo, son quizá las más conocidas. Se trata de certificaciones que avalan que la organización cumple unos estándares de calidad en sus procesos.

Otras certificaciones, de las que te hablamos en este post sobre logística verde o cómo reducir el impacto ecológico de tu empresa con procesos sostenibles, son pasos para certificarse como empresa respetuosa con el medio ambiente, sostenible y socialmente responsable. 

Conseguir cualquiera de estas certificaciones nunca ha de ser un fin en sí mismo, sino una puerta hacia la mejora y una forma de aportar valor tanto a la organización como al entorno.

Las empresas son cada vez más conscientes de que este es el camino, y por eso la tendencia, desde hace años, es invertir esfuerzos y recursos en certificar la calidad en todos los sentidos

En ese marco, el modelo EFQM es una herramienta más. A continuación, te explicamos esquemáticamente los 3 pilares en los que se basa:

 

1. Dirección: menos jerarquía, más liderazgo

La dirección de una organización es fundamental para posicionarla en su sector y dirigirla hacia sus objetivos. Para eso, según el modelo EFQM es necesario:

  • Definir un propósito que inspire a toda la organización
  • Crear una estrategia para lograrlo, con un plan detallado
  • Fomentar una cultura organizativa alineada con el propósito

Para lograrlo, el liderazgo debe abarcar a la organización completa, no solo a una persona o un grupo que marque directrices desde los puestos de dirección. La empresa en su conjunto debe convertirse en líder de su sector, y un referente para su competencia.

 

2. Ejecución: la clave es la estrategia

El segundo pilar del EFQM se basa en la implicación de todos los grupos que forman parte de la organización y su compromiso en la tarea de crear valor y trabajar para conseguir objetivos de desarrollo sostenible. 

La visión a largo plazo, la comunicación directa con todos los departamentos para obtener feedback y mejorar la implicación de los grupos de interés, son fundamentales para que la estrategia sea sostenible.

 

3. Resultados: análisis y seguimiento 

El análisis de resultados se utiliza para mejorar el rendimiento y hacer predicciones razonables sobre su evolución futura. 

El modelo EFQM dispone de herramientas de diagnóstico y una metodología bien definida para ayudar a las empresas a analizar los distintos parámetros y trazar objetivos de mejora.

 

¿Quieres mejorar la gestión de tu empresa o almacén?

En el camino hacia la excelencia hay muchos pasos que contribuyen a ir avanzando. Uno básico para mejorar la gestión es digitalizar los procesos e implementar herramientas automatizadas de control.

Y, en eso, podemos ayudarte. ¿Aún no conoces nuestro SGA TWO? Ponte en contacto con nosotros y te explicamos cómo puede ayudarte a mejorar la calidad de tus procesos de gestión de almacén.