Qué es la cadena de suministro y cuáles son sus fases

[Supply chain] ¿Qué es la cadena de suministro y cuáles son sus fases?

En los últimos tiempos, los medios de comunicación hablan con cierta frecuencia de crisis en la cadena de suministro y de los problemas que esa situación genera. Pero ¿sabrías definir con exactitud qué es la cadena de suministro y por qué es tan importante?

Hoy por hoy, las redes por las que se mueve el comercio internacional revisten una enorme complejidad. Tanta, que cualquier alteración en un punto de la llamada cadena de suministro puede ocasionar un “terremoto” logístico global, como sucedió en 2021 cuando un buque bloqueó el canal de Suez.

Hoy queremos explicarte qué es la cadena de suministro y por qué es clave para garantizar el abastecimiento global.

 

Qué es la cadena suministro

La cadena de suministro o supply chain es el ciclo completo que recorre una mercancía, desde su etapa de preproducción, cuando aún solo existen las materias primas, hasta que ya es un producto manufacturado y listo para entregar al cliente final. 

Todo ese recorrido es lo que comúnmente se conoce como cadena de suministro y, para que funcione de forma fluida y sin interrupciones, requiere una coordinación perfecta entre todos los eslabones que participan directa o indirectamente, colaborando en los procesos de gestión.

Gestionar la cadena de suministro implica diseñar una perfecta transición de un eslabón a otro de cara a aumentar la eficiencia. La clave es gestionar el proceso en su conjunto, desde la obtención de las materias primas hasta que el producto manufacturado llega a su destino, y hacer crecer el valor del producto durante todo ese trayecto. 

El fenómeno de la globalización y, en concreto, el crecimiento imparable del comercio electrónico, ha hecho que las cadenas de suministro sean cada vez más extensas. 

Hoy las fronteras comerciales se han difuminado. Un producto puede fabricarse en un punto del globo y ser transportado a miles de kilómetros para ser vendido. Por el medio hay muchos intermediarios coordinados, hay aduanas, hay empresas transitarias, hay transportistas y almacenistas…

Es fácil imaginar que cualquier alteración puede romper el flujo de mercancías. Por eso hoy se habla de la necesidad de buscar fórmulas para crear cadenas de suministro más flexibles y resilientes.

 

¿Logística y cadena de suministro son lo mismo?

Aunque muchas veces se utilizan en contextos similares, no son conceptos idénticos.

Podríamos decir que la logística es un eslabón más de la cadena de suministro, y se encarga de la gestión de estas tres fases:

  • El almacenamiento de productos y mercancías
  • La organización del transporte 
  • La distribución de los productos y mercancías hasta el cliente final

El concepto de cadena de suministro es mucho más amplio. Abarca desde la planificación previa a la producción hasta otras tareas adyacentes, como por ejemplo el marketing y las ventas.

 

Las 5 fases principales de la cadena de suministro

Lo primero que hay que tener en cuenta es que existen muchos tipos diferentes de cadenas de suministro. Una mercancía fabricada en Taiwan que se vende en tiendas minoristas de Europa, pasa por una cadena de suministro más compleja que un producto fabricado y distribuido dentro del mismo país. 

La cantidad de intervinientes o eslabones, la distancia, la complejidad de las operaciones, crean diferencias muy significativas.

No obstante, se pueden establecer unas fases básicas, comunes a todas las cadenas de suministro. Son estas:

 

1. Planificación

Cada empresa debe valorar sus opciones estratégicas orientadas a la producción. 

Por ejemplo, debe decidir dónde va a adquirir las materias primas o componentes, si en proveedores nacionales o extranjeros. O si se va a producir bajo demanda o para generar stock. O si se va a subcontratar alguna parte de la producción.

La planificación también implica diseñar las instalaciones, tanto de fabricación como de almacenamiento, y ajustar todo el proceso a los objetivos empresariales de la compañía. 

La fase de marketing y ventas entraría también en planificación, aunque de forma ideal tiene que estar presente en toda la cadena de suministro.

 

2. Aprovisionamiento

Una vez planificado el proceso productivo, hay que comprar materias primas o componentes. Eso implica elegir proveedores, negociar precios y diseñar una estrategia de compras en coordinación con la producción, para no comprometer los niveles de stock.

 

3. Producción

En esta fase se organiza todo el ciclo de fabricación de los productos, desde su diseño hasta las condiciones de almacenamiento o el empaquetado más conveniente. La fase de producción también implica cumplir la normativa vigente para cada tipo de producto.

 

4. Expedición

Comprende todos los pasos desde que se recibe una consulta de un cliente hasta que se confirma el pedido, se prepara para su expedición, se diseña un plan de transporte y se entrega, bien a un minorista, bien a un cliente final.

 

5. Retorno

En ocasiones, los productos expedidos vienen de vuelta por diversas causas: productos defectuosos o al límite de su vida útil, errores en el envío, cambio de artículos.

De esta fase se ocupa la llamada logística inversa, que también gestiona el retorno de envases y embalajes para su reciclado.

 

Optimiza la gestión de la cadena de suministro

Utilizar las herramientas digitales que hay hoy disponibles en el mercado y hacerlo de la forma adecuada, te va a ayudar a mejorar la efectividad y el rendimiento. 

Implementar un sistema de gestión de almacén o SGA, como el SGA TWO de SCM Logística, es la forma de sacar el máximo partido a un almacén, llevando el control de forma automatizada de todos sus procesos. 

Podemos ayudarte a diseñar una solución personalizada para dar un salto en la gestión de tu almacén. Solo tienes que ponerte en contacto con nuestro equipo. Llámanos y te asesoramos sin compromiso.

Cadena de suministro SCM

¿Quién gestiona la cadena de suministro de tu empresa?

¿Qué características y funciones debe tener la persona que gestiona la Supply Chain (cadena de suministro) de tu empresa? 

Ser responsable de esa área requiere visión estratégica y conocimientos específicos, así que es importante dar con el perfil adecuado. De ello depende la eficiencia y la competitividad de tu negocio.

Afortunadamente, hoy en día existen profesionales altamente cualificados para realizar esta tarea. Veamos, por tanto, qué tipo de perfil es el que necesitas para gestionar tu SCM.

 

Qué es la cadena de suministro y por qué es tan importante su gestión

La cadena de suministro es un complejo conjunto de actividades y procesos necesarios para el abastecimiento de una empresa, la fabricación de productos, producción, distribución, transporte y entrega.

Es un engranaje que debe coordinarse de manera perfecta, con el fin de lograr la total satisfacción del cliente final.

La gestión de todos estos procesos se conoce como Supply Chain Management (SCM) y abarca la dirección logística y operativa de una empresa, con el objetivo puesto en realizar el proceso con la mayor eficiencia, optimización de recursos y asegurando una buena experiencia de usuario.

Pincha aquí si quieres ampliar información sobre qué es el Supply Chain Management (SCM) y cómo se relaciona con la logística.

La gestión de la cadena de suministro es una enorme responsabilidad y requiere un alto nivel de capacitación. 

La persona que asuma esa función debe adquirir una visión global de la empresa y conocer en profundidad las herramientas de gestión de operaciones que le servirán para desarrollar tareas de dirección en los apartados de compras, planificación, producción logística y distribución.

Para comprender la importancia de la profesionalización en este sector, basta nombrar el rápido avance de la llamada Logística 4.0 y los cambios que ya se están operando en la cadena de suministro, superando la digitalización de la revolución anterior y añadiendo la hiperconectividad, la gestión del Big Data y la utilización de aplicaciones en la nube.

El perfil profesional de un responsable de SCM es ya uno de los más demandados y tiene una gran proyección para el futuro, cuando la gestión tradicional de la cadena de suministro sea definitivamente superada por la tecnología de la Cuarta Revolución Industrial.

 

El gestor de SCM: ¿de qué se ocupa?

Las funciones de un gestor de la cadena de suministro abarcan desde la planificación de operaciones (coordinación de compras, gestión del almacenaje), la coordinación de las tareas de producción y la distribución final de la mercancía. 

Es decir, debe supervisar la cadena de principio a fin, logrando los objetivos con un sistema lean aplicado a la gestión de la SCM, es decir, gastando lo imprescindible y en el menor tiempo posible.

 

1. Definir la estrategia de la empresa

El gestor de la cadena de suministro debe conocer en profundidad los objetivos, valores y propósito de la compañía, así como los recursos disponibles para alcanzarlos.

Una vez conozca todos los procesos logísticos y los haya evaluado, elaborará una estrategia de actuación que involucre la actividad global de la empresa, con todos los departamentos implicados, interconectando las distintas actuaciones para ganar eficiencia.

Para ello, se ocupará de implementar los medios necesarios, como herramientas de software de gestión que centralizan la información de la empresa y la hacen accesible en tiempo real.

Asimismo, debe vigilar los resultados para asegurarse de que no se producen desviaciones del plan trazado, y si así fuese, realizar las correcciones necesarias.

 

2. Desarrollar visión interdepartamental y gestionar al equipo

Para que la cadena funcione, la coordinación entre departamentos es clave. Todos los empleados de la empresa deben ser conscientes de que su trabajo contribuye a un objetivo común, y que de su eficacia depende la buena marcha del proyecto.

Por eso, un buen gestor es también un líder de equipo, capaz de motivar e inspirar a las personas trabajadoras de todas las fases de la cadena.

 

3. Negociar con proveedores

El Supply Chain Manager es quien se ocupa de tratar con las empresas suministradoras para ajustar el precio de la mercancía y los tiempos de entrega, de forma que nunca se vea interrumpida la actividad productiva.

La habilidad negociadora y el conocimiento del mercado son imprescindibles para realizar esta tarea.

 

4. Calcular el stock

Esta tarea implica que no se acumule mercancía innecesariamente, con el consiguiente aumento de los gastos de almacenaje, pero que tampoco falte suministro y se produzca la temida rotura de stock, que puede minar la confianza en la efectividad de la empresa y derivar en la pérdida de clientes. 

Para ello es imprescindible tener un conocimiento profundo de cómo se mueve el mercado y realizar los cálculos necesarios.

 

5. Coordinar la distribución

El objetivo final es la total satisfacción del cliente final (sea este otra empresa o un usuario particular). Para eso, el último paso es fundamental. 

El gestor debe crear una red de distribución con una flota propia o contratada, en función de las necesidades de la empresa. En ambos casos el objetivo es que las entregas se realicen en el tiempo estimado y con los menores costes.

 

¿Está optimizada la cadena de suministro de tu empresa?

En ocasiones es recomendable una mirada externa para detectar errores y definir mejores estrategias según cada caso.

Porque si la cadena de suministro no es eficiente, estarás perdiendo recursos y situándote por debajo del nivel de competitividad que podrías tener si realizases los ajustes necesarios.

Por tanto, no tardes en tomar la decisión de pedir, al menos, asesoramiento profesional para saber en qué punto te encuentras y cuáles son las posibilidades de mejora. Simplemente ponte en contacto con nosotros y buscaremos soluciones adaptadas para tu empresa. 

Supply Chain Management

Supply Chain Management y su relación con la logística

Es relativamente habitual que estos dos términos se utilicen indistintamente o se confundan en algunos contextos. Pero Supply Chain Management y logística, aunque son conceptos cercanos, no significan lo mismo.

Para despejar dudas, hoy vamos a ver en qué consiste cada uno.


Supply Chain Management vs. logística

Cuando hablamos de Supply Chain Management (SCM) nos referimos al conjunto de procesos que implica el flujo de suministros a una empresa, y abarca desde el aprovisionamiento de materias primas para la fabricación de un producto hasta su entrega al cliente final.

SCM implica, por tanto, los procesos de provisión, producción y distribución, y requiere una coordinación perfecta entre todos los eslabones de la cadena. Solo así se puede garantizar un funcionamiento ágil y flexible para adaptarse a la demanda y con costes ajustados. 

¿Y a qué nos referimos cuando hablamos de logística?

La logística forma parte del SCM. Se ocupa de una parte de las tareas, las que tienen que ver con:

  • La gestión eficiente del almacenamiento de mercancías.
  • La organización y ejecución del transporte, en todas las fases de la cadena.
  • La planificación de la distribución hasta el último punto o cliente final.

El éxito de una empresa depende mucho de un SCM eficiente, planificado de forma profesional y muy bien coordinado con todas las aplicaciones de la logística, que vemos a continuación.


Tipos de logística en la cadena de suministro

Hablamos de logística en singular, cuando lo cierto es que existen diferentes tipos de logística, en función de la actividad. Las principales son estas:

Logística de aprovisionamiento

Es el conjunto de operaciones orientadas al control del abastecimiento de un almacén. La logística de aprovisionamiento se ocupa de organizar la relación con los proveedores y la recepción de mercancías, velando por la optimización de costes.

Puede tratarse tanto de suministros de materias primas necesarias en la fase de producción como de productos manufacturados listos para ser expedidos al cliente final.

Logística de producción

Se ocupa de optimizar todas las fases que llevan a conseguir el producto final, es decir, toda la fase productiva: desde que se reciben los aprovisionamientos de materias primas, pasando por las transformaciones necesarias hasta que pasa a la siguiente fase de distribución.

Uno de sus objetivos es que el tiempo que transcurre entre que se recibe una orden de producción y se obtiene el producto, sea el menor posible.

Logística de distribución

Desde el momento en que tenemos el producto elaborado hasta que llega al cliente final, está en manos de la logística de distribución. 

En este momento entran en juego distintos canales de distribución, por lo que se requiere un enorme esfuerzo de coordinación entre todos los intermediarios y un correcto seguimiento de las mercancías.

Logística inversa

Se ocupa de todos los procesos de retorno de mercancías. Puede tratarse de embalajes o envases que se recuperen para reciclaje, también excesos de stock, o productos devueltos por clientes.

Logística ambiental

Es una rama que trata de que los procesos logísticos sean sostenibles y tengan el menor impacto posible en el medio ambiente.

En este tipo de logística se encuadrarían actividades como la medición de la huella de carbono de los procesos o los empaquetados ecológicos.


3 beneficios de una buena coordinación entre el SCM y la logística en una empresa

Proveedores, transportistas, administrativos, operarios de almacén… La gestión de la cadena de suministro abarca infinidad de detalles. Para que funcione de manera eficiente la coordinación con las tareas logísticas es fundamental. 

Un buen management supone:

  1. Mejorar los tiempos. Una correcta gestión del SCM ayuda a que la parte logística optimice el tiempo invertido en mover las mercancías, haciendo una correcta previsión de stocks y estableciendo una comunicación eficiente con los proveedores.
  2. Reducir necesidades de almacenamiento. El almacenamiento es una de las partes más costosas de toda la cadena logística. Por tanto, una buena gestión evitará que el almacén acumule mercancía obsoleta o de dudosa salida, ya que la provisión de mercancía se ajustará lo máximo posible a la demanda. Un buen software de gestión de almacén (SGA) es imprescindible. 
  3. Eliminar errores. El correcto flujo de información entre los distintos eslabones es clave para tener el control de la cadena en todo momento. Así, es posible evitar pérdidas de material, deterioros y fechas vencidas.

El SCM aplicado a los distintos tipos de logística ayuda a obtener la mayor rentabilidad posible entre beneficios y costes. Las empresas son conscientes y por eso la demanda de profesionales en este sector no ha dejado de aumentar en los últimos años.


¿Cómo optimizar el Supply Chain Management de tu empresa y la gestión logística?

Hoy por hoy, cualquier empresa que quiera mantenerse en un alto nivel de competitividad, debe asegurarse de que la cadena logística funciona sin errores y con el mínimo consumo de recursos. 

Si necesitas revisar la gestión de la cadena de suministro en tu empresa y su coordinación con las diversas tareas logísticas, nuestro consejo es que no des vueltas. Para ganar eficiencia, lo mejor es que te dejes asesorar por profesionales. Y cuanto antes, mejor.

Nosotros podemos analizar las necesidades específicas de tu empresa y proponerte soluciones ajustadas. Solo tienes que ponerte en contacto con nosotros y te asesoramos sin compromiso.