Almacén de Depósito Temporal (ADT)

Almacén de Depósito Temporal (ADT): lo que debes saber

Hay un tipo de almacén cuyo uso es muy habitual en el caso de empresas que importan productos de fuera de la Unión Europea. Se trata del Almacén de Depósito temporal (ADT) y, como su nombre indica, sirve para almacenar temporalmente mercancías mientras esperan a ser despachadas en la aduana. 

En este artículo te explicamos qué es un ADT, qué obligaciones conlleva y cuáles son las ventajas que ofrece a las empresas importadoras.

 

¿Qué es un Almacén de Depósito Temporal?

Un almacén de depósito temporal (ADT) es un tipo de instalación de almacenamiento donde las mercancías importadas se pueden almacenar antes de pagar los derechos de aduana. 

Se trata de mercancías que se encuentran en régimen de depósito temporal, una categoría que define la situación aduanera para aquellas mercancías provenientes de países no comunitarios. Debe solicitarse la declaración de depósito temporal en el momento en que la mercancía se presente en aduana.

Las mercancías bajo en régimen de depósito temporal solo pueden derivarse a establecimientos autorizados por las autoridades aduaneras. Esos espacios son los Almacenes de Depósito Temporal. 

Son lugares supervisados que proporcionan a las empresas un lugar temporal para almacenar la carga en condiciones de seguridad, mientras esperan a recibir destino aduanero, es decir, mientras esperan la autorización para ser liberadas después de haber cumplido con los requisitos de las autoridades de aduanas.

El ADT es utilizado principalmente por empresas que importan mercancías desde países no comunitarios. También es posible almacenar mercancías procedentes de la UE junto con otras no comunitarias cuando pertenecen a un mismo importador. En ese caso es imprescindible contar con la autorización de las autoridades, que verificarán que ambos tipos de mercancías sean identificables.

Para las empresas importadoras, disponer de la opción del régimen de depósito temporal y la posibilidad de almacenar temporalmente las mercancías en un ADT, aporta seguridad a las operaciones, así como flexibilidad y fluidez a la cadena de suministro.

Hay otro tipo de depósitos con los que es fácil confundirse. Se trata del Depósito Aduanero (DA), que es también un espacio para el almacenamiento de mercancías de países no comunitarios. 

La diferencia principal entre el DA y el ADT es que en el Depósito Aduanero no existe un plazo límite de tiempo para almacenar las mercancías. Además de eso, se permite cierta manipulación de la mercancía siempre y cuando no se altere su estado original.

 

¿Cuánto tiempo  puede permanecer la mercancía en un Almacén de Depósito Temporal?

La mercancía puede permanecer en un Almacén de Depósito Temporal (ADT) durante un período limitado de tiempo. 

En un principio, el plazo estipulado es de 45 días para mercancías que lleguen por vía marítima y 20 para las que lleguen por otras vías, a contar a partir de la fecha de la declaración (art. 49 del Reglamento (CEE) nº. 2913/92).

En algunos casos puede aplicarse un plazo de hasta 90 días (art. 149 Reglamento (UE) nº 952/2013). Durante ese tiempo la mercancía puede permanecer en el ADT sin que le haya sido asignado un régimen aduanero.

En el plazo máximo indicado, la empresa responsable ha de abonar los impuestos y aranceles para liberar la mercancía, gestionar su traslado al Depósito Aduanero Público o solicitar el régimen de Despacho a Libre Práctica, es decir, que a una mercancía no comunitaria se le otorgue el estatuto aduanero de mercancía comunitaria.

Si no se retira la mercancía en el plazo máximo permitido, las autoridades deciden si se devuelve al exportador, se destruye o se le asigna algún otro destino.

 

Ventajas que ofrece el Almacén de Depósito Temporal a las empresas de importación

Para las empresas que importan mercancías provenientes de países no comunitarios, contar con este servicio es sumamente interesante.

La ventaja principal es que pueden aplazar el pago de impuestos y aranceles, ya que no es necesario abonarlos hasta que la mercancía sea liberada. Ese margen de tiempo es muy valioso, ya que permite a las empresas gestionar estratégicamente los tiempos y pagar en el momento más conveniente para ellas.

Por otra parte, les permite importar grandes volúmenes de mercancía, ya el ADT permite que puedan ser liberadas escalonadamente. De ese modo, tienen un plazo que puede ser de hasta tres meses para ir pagando las tasas recuperando la mercancía en diferentes fases. Eso supone un importante ahorro en los costes derivados del transporte.

 

Mejoramos la eficiencia de cualquier tipo de almacén

Cualquier tipo de instalación de almacenamiento puede mejorar la gestión de procesos, el aprovechamiento del espacio o la eficiencia del trabajo humano.

Para ello es imprescindible contar con un software específico que centralice todas las operaciones y permita comenzar a controlar adecuadamente toda la información necesaria para un funcionamiento efectivo. Ese software es TWO, un SGA competitivo, fácil de manejar, flexible y escalable.

Cuando quieras, te lo presentamos. Solo tienes que preguntarnos, poniéndote en contacto con nosotros aquí. 

Claves para la gestión de residuos en almacenes

Claves para la gestión de residuos en almacenes

Todos los almacenes y centros de distribución generan desperdicios, en un volumen mayor o menor según la naturaleza de su actividad. Pero hay algo que todos deben hacer, sea cual sea su caso: gestionar esos residuos de la mejor manera posible.

¿Cómo hacerlo? En este post te damos algunas claves. 

 

Gestión de residuos: la importancia de planificar

En muchos almacenes y centros de distribución, especialmente en los más grandes, que constan incluso de varios espacios interconectados, la manipulación de residuos para su correcta eliminación, reutilización o reciclado puede suponer un quebradero de cabeza importante si no se ha hecho una buena planificación desde el principio.

Y decimos desde el principio, porque el mejor momento para plantearse el tema de la gestión de residuos es, sin duda, cuando se planifica el almacén, ya sea para iniciar su construcción, abordar una reforma o añadir una nueva sección a un almacén existente. 

Es en ese momento, cuando se va hacer el diseño o remodelación del layout de la instalación, cuando hay que tener en cuenta cómo se va a planificar la gestión de materiales de desecho.

Lamentablemente, no se hace así en todos los casos, ya que un error habitual tanto en las pequeñas como en las grandes empresas cuando planifican un edificio nuevo o una ampliación es olvidarse de cómo se gestionará el flujo de de estos materiales.

En muchas ocasiones se priorizan otros aspectos y la gestión de residuos queda en un segundo plano, lo que puede ser una fuente de problemas más tarde o hacer necesaria la implementación posterior de soluciones más caras.

Lo ideal es contar con un equipo profesional que desarrolle un diseño integral del proyecto, teniendo en cuenta todos los aspectos que influyen en el funcionamiento diario de la instalación, lo que incluye, obviamente, incluir soluciones para este tema. 

Para ello hay que tener en cuenta qué tipo de mercancías se van a recibir, con qué envases o embalajes y en qué cantidades. Así, se podrán elegir las equipaciones correctas, con la capacidad adecuada para manipular todos los desechos que se produzcan diariamente en el almacén, y con espacio suficiente para que los operarios puedan depositar los residuos en el punto señalado con el mínimo esfuerzo, para poder continuar trabajando.

Si se planifica correctamente la intervención, el almacén tendrá desde el inicio un sistema sostenible y no una solución de última hora que será, con toda probabilidad, más cara y menos eficiente.

 

El plan de gestión de residuos

Un plan de gestión de residuos es un documento que expone cuáles han de ser las medidas a tomar para el almacenamiento temporal y la gestión de los materiales de desecho generados en una empresa.

Tener un plan de gestión de residuos es recomendable para cualquier compañía, no solo para las del sector del almacenamiento y la logística, aunque en estas es especialmente necesario debido al gran volumen de residuos que pueden llegar a generar con su actividad diaria.

Hay que tener en cuenta que la tendencia actual en general, y en concreto en las empresas que operan en cualquier punto de la cadena de suministro, es apostar por lo que llamamos logística verde. 

Cada día es más importante minimizar el impacto de la actividad en el medio ambiente, implantando prácticas sostenibles que permitan hacer un mejor uso de los recursos disponibles.

En este contexto, disponer de un plan de gestión de residuos en el almacén, no solo redunda en un mejor funcionamiento general de la empresa, también ayuda a reducir costes a medio plazo, mejora la calidad del ambiente de trabajo y la salud de las personas trabajadoras, y supone un mejora de la imagen empresarial de cara a clientes y proveedores.

Para elaborar un plan de gestión de residuos es necesario cumplir con estos pasos:

  1. Estudio previo: se deben analizar las necesidades de la empresa, identificar cuáles son los diferentes tipos de residuos que la empresa debe gestionar y en qué volumen. De ese modo se pueden establecer las medidas adecuadas en cada caso.
  2. Legislación: una vez identificados los residuos, es fundamental comprobar cuáles son las normativas aplicables en cada caso, para asegurar que el plan propuesto cumpla con la legislación vigente.
  3. Metas: el plan debe trazar objetivos claros y cuantificables, para poder hacer un seguimiento de la efectividad del plan y su impacto en la gestión integral de la empresa.
  4. Acciones: el plan debe detallar cuáles son las medidas a implementar y cómo hacerlo, de la manera más efectiva posible.
  5. Evaluación: por último, será necesario realizar revisiones periódicas para verificar que el plan de residuos se ejecuta correctamente, detectar puntos mejorables o actualizarlo introduciendo nuevas variables.

 

Te ayudamos a planificar tu almacén 

La mejor forma de evitar errores en el futuro es hacer una planificación correcta desde el principio. De ese modo, se consigue sacar el máximo partido al espacio disponible en el almacén, se alcanza la máxima eficiencia en las operaciones y se saca rendimiento a la inversión realizada.

¿Quieres conseguir esos tres objetivos en tu almacén? Ponte en contacto con nuestro equipo y tracemos juntos un plan de acción para maximizar resultados.

Guía de buenas prácticas para almacenes

Guía de buenas prácticas para almacenes

La gestión de almacenes es el resultado de la suma de muchas acciones y el equilibrio entre todas ellas. Hay que garantizar que haya suficiente inventario, pero tampoco demasiado para no ocupar espacio sin necesidad. 

Hay que conseguir que el inventario sea accesible y a la vez mantenerlo a salvo de hurtos. Hay que trabajar con agilidad, pero sin prisas que aumenten el riesgo de errores y accidentes… 

¿Cómo se consigue que todo salga bien?

Para ayudarte a organizar tu almacén, hemos elaborado una lista de 8 buenas prácticas para conseguir que todo funcione como un reloj.

 

8 buenas prácticas para almacenes eficientes

Como decíamos, un almacén eficiente es el resultado de no una, sino muchas decisiones estratégicas enfocadas a mejorar la operativa, mantener los gastos bajo control, cometer los errores mínimos, trabajar con agilidad, ofrecer confianza a clientes y proveedores.

Aunque cada almacén tiene su propio funcionamiento, hay una serie de características comunes a aquellos más eficientes, y son estas:

 

1. Optimiza el espacio

En un almacén, el espacio es oro, por eso hay que sacarle el máximo rendimiento posible. Es fundamental planificar bien desde el primer momento, con un diseño que permita aprovechar cada centímetro de superficie en horizontal, respetando siempre los espacios necesarios para los desplazamientos y el trabajo de los operarios.

También hay que optimizar el espacio vertical, desaprovechado en muchísimos casos. Los sistemas automatizados de almacenamiento y recuperación son los indicados para ganar espacio útil.

 

2. Almacena con sentido

Un error muy común es organizar el inventario en función del proveedor, colocando juntos todos sus productos. No es así. Lo recomendable es hacer un análisis ABC del inventario para definir cuáles son las diferentes categorías. 

Así se puede identificar cuáles son los productos que interesa colocar en los lugares más accesibles y diseñar la mejor estrategia, que puede ser poner más a mano los productos de mayor rotación, o los de mayor valor, o una combinación de ambos criterios.

 

3. Haz seguimiento de los KPI más importantes

Los KPI te van a dar la información que necesitas para conocer en todo momento si el rendimiento del almacén está en línea con los objetivos marcados.

Revisa los indicadores con regularidad para saber si es necesario hacer ajustes, y cuáles. Es la forma de tener el almacén bajo control y poder tomar decisiones con información real.

 

4. Vigila la seguridad

Que la plantilla trabaje con los EPIs adecuados, tenga la formación necesaria para hacer sus tareas, disponga de apoyos mecánicos suficientes y en buen estado, haga su tarea en un entorno acondicionado y bien señalizado, etc., es clave para la seguridad, que a su vez impacta directamente en la eficiencia.

Los almacenes que no invierten el tiempo o el dinero necesarios para priorizar la seguridad acaban siendo menos productivos, ya que aumenta el número de incidentes y/o accidentes en el lugar de trabajo, y con ellos las bajas, las indemnizaciones y el coste global de los seguros.

 

5. Apuesta por la digitalización de procesos

Tener todavía procesos basados en la hoja impresa y el bolígrafo es un lastre para almacenes que pretenden ser competitivos. 

No es solo el índice de errores, resultado de anotar mal un dato o no compartir un Excel crítico con otro departamento. Es que hoy por hoy no es posible gestionar la complejidad de un almacén con sistemas de recogida y procesamiento manual de datos.

 

6. Automatiza el picking

Un picking improvisado o mal organizado es una fuente interminable de errores y supone un desgaste importante para la empresa. Las confusiones generan excesivas devoluciones, multiplican el trabajo y generan malestar en los clientes.

Hoy en día existen sistemas automatizados de picking adaptables a cualquier tipo de proceso y tamaño de empresa. Por poco que parezca, cualquier proceso que se pueda automatizar multiplicará la eficiencia.

 

7. No descuides el mantenimiento

Tener un plan de mantenimiento preventivo de toda la maquinaria evitará averías y paradas indeseadas para hacer reparaciones. Además, es la forma de alargar la vida de todos los dispositivos y ahorrar dinero.

El mantenimiento también incluye el cuidado de las instalaciones, las reparaciones menores, la limpieza de todo el recinto, la señalización actualizada, etc.

Un entorno bien cuidado repercute en el bienestar y la productividad de los trabajadores.

 

8. Confía en un SGA

Un SGA es imprescindible para integrar en una sola herramienta todas las cuestiones organizativas de un almacén. Se trata de un software especializado, capaz de llevar el control del inventario, hacer seguimiento de la mercancía, gestionar el picking, optimizar el espacio y otras tareas.

En SCM Logística apostamos por TWO, The Warehouse Organizer, un desarrollo propio que ya se ha posicionado como uno de los mejores SGA del mercado actual: intuitivo, eficiente, flexible, escalable.

Si quieres saber más sobre TWO o sobre cualquier mejora que quieras implementar en tu almacén, ponte en contacto con nuestro equipo y respondemos todas tus dudas.

Principales retos de los almacenes de alimentación

Los 6 principales retos de los almacenes de alimentación

Dentro del sector, la logística de los productos alimentarios es especialmente desafiante: regulaciones y normativas, control de las caducidades, almacenamiento en frío, previsión de la demanda… 

A continuación, te detallamos cuáles son los retos más importantes de un almacén de alimentación.

 

Almacenes de productos alimentarios: 6 desafíos a tener en cuenta

Dentro del conjunto de la cadena de suministro que recorre un alimento desde la fase de producción hasta el consumidor final, el almacenamiento constituye un eslabón importante para garantizar la calidad y la seguridad, que se basan en estos 6 pilares:

 

1. Trazabilidad

En cualquier almacén, pero especialmente en uno de productos alimentarios, es imprescindible poder tener una visión completa del histórico de un producto a lo largo de toda la cadena de suministro y saber en todo momento en qué punto se encuentra una mercancía y por qué eslabones o fases ha ido pasando. 

En este caso, de ello depende en buena medida la seguridad alimentaria. Sin un sistema fiable de trazabilidad no es posible saber dónde está cada lote y en qué momento debe ser retirado por ejemplo, porque su fecha de caducidad ha vencido. 

 

2. Inventario

Disponer del stock necesario para satisfacer los pedidos es siempre un reto, más aún teniendo en cuenta que el mercado alimentario se ve afectado por tendencias de consumo que no siempre son fáciles de prever.

Aun así, el almacén que se dedica a este tipo de productos debe tratar de mantener el equilibrio para no quedarse sin mercancía y poder abastecer a sus clientes… pero no acumular demasiada cantidad. El exceso de inventario supone un problema, especialmente tratándose de productos con fecha de vencimiento o una vida útil limitada. 

Si el almacén no consigue tener bajo control la rotación de productos y que la mercancía se venda de una forma fluida dentro de los tiempos marcados, perderá lo invertido.

 

3. Calidad

Los clientes y consumidores son especialmente exigentes con los productos de alimentación. Además, la reputación de las marcas depende de que puedan mantener un alto nivel de satisfacción y generar experiencias positivas para los usuarios. De ahí que mantener unos estándares de calidad elevados sea otro de los grandes retos de los almacenes de este sector.

 

4. Seguridad

Sin duda, el factor más importante es la seguridad, que jamás debe verse comprometida. Más allá del sabor o la presencia, los productos deben ser seguros para el consumo, y ello depende en buena medida de que los procesos de almacenado hayan sido correctos, con condiciones adaptadas a cada tipo de alimento. 

Carnes, pescados, lácteos, frutas y verduras frescas, necesitan almacenaje refrigerado, mientras que con otros productos envasados o empaquetados es prioritario mantener unas condiciones óptimas de humedad.

 

5. Cadena de frío

El control efectivo de la cadena de frío es esencial para preservar tanto la calidad como la seguridad de los productos alimentarios perecederos. 

Es necesario que los almacenes cuenten con infraestructuras adecuadas para el tipo de productos con los que trabajan, con instalaciones de refrigeración y congelación eficientes capaces de mantener la cadena de frío.

Los equipos frigoríficos deben estar monitorizados 24/7 para vigilar cualquier alteración, no sólo en lo relativo a temperatura o el grado de humedad, también hay que tener en cuenta otras variables, como la condensación, consumos, vibraciones, presión o cortes de suministro. Los datos obtenidos han de ser procesados por un software específico.

> Conoce cuáles son los retos del almacenamiento en frío pinchando aquí. 

 

6. Alérgenos

Para cumplir con la legalidad, las industrias alimentarias deben tener implementado un sistema que garantice una correcta gestión de alérgenos en su producción, con protocolos en toda la cadena que eviten la contaminación cruzada. Eso abarca la producción, el envasado, el etiquetado… y también el almacenaje de alimentos. 

El objetivo es minimizar la probabilidad de que, con la manipulación, las trazas de alérgenos se dispersen y puedan contaminar otros productos.

 

TWO, aliado de los almacenes de alimentación

Para la correcta gestión de un almacén de alimentación, contar con un SGA no es una opción, sino una necesidad. 

Un SGA es clave para mantener la trazabilidad. El software permite conocer en tiempo real toda la información del lote, fecha de producción, certificados, variedad del producto, lugar de origen, etc. 

Es esencial para una gestión eficiente del inventario, mejorando la planificación y alineando la oferta y la demanda. Si además incorpora funciones de analítica predictiva, será posible incluso tener en cuenta los datos históricos para hacer previsiones fiables, que permitirá a la empresa estimar el número de pedidos y adelantarse al mercado.

Finalmente, es la garantía para monitorizar todos los procesos de almacenaje y asegurar que cumplen con todas las normativas y regulaciones que imponen las autoridades sanitarias.

En SCM Logística hemos implementado nuestro propio SGA, The Warehouse Organizer (TWO) en multitud de almacenes de distintos sectores, incluido el alimentario. Y, en ocasiones, asumiendo importantes retos. 

Por ejemplo, cuando nos propusieron implementar TWO en una gran empresa alimentaria sin interrumpir la actividad. Lo hicimos en Garcimar, una empresa de congelados y refrigerados. Aquí te contamos los detalles.

¿Quieres conocer más sobre TWO? Ponte en contacto con nosotros y te contamos todo lo que quieras saber.

Realidad aumentada aplicada a la gestión de almacenes

Realidad aumentada y gestión de almacenes: el futuro ya está aquí

Hoy por hoy, no hay sector que no esté buscando constantemente soluciones innovadoras para hacer más, empleando menos tiempo y recursos. Y entre esas soluciones que marcan una diferencia importante, está la realidad aumentada, que ya se abre camino en el área de la gestión de almacenes.

Preparación de pedidos, diseño de las instalaciones, gestión del inventario… La realidad aumentada tiene un enorme potencial para incrementar la eficiencia de un almacén. En este post vamos a explicarte qué es la RA y cómo está mejorando el rendimiento de muchas empresas de almacenamiento.

 

¿Qué es la realidad aumentada aplicada a la gestión de almacenes?

La realidad aumentada es una tecnología que integra elementos virtuales (datos, gráficos, imágenes, sonidos, etc) en un entorno real, de forma que “aumenten” la realidad, es decir, la enriquezcan con información superpuesta que ayuda al usuario.

Si trasladamos esta explicación al almacén, podemos decir que la realidad aumentada crea una capa virtual de información sobre las distintas tareas que se llevan a cabo en la instalación. Esa información ayuda a los trabajadores a llevar a cabo sus funciones de manera mucho más precisa.

Un operario que trabaje utilizando un sistema de realidad aumentada podrá visualizar e interactuar con la información que aparece superpuesta en su entorno físico y que le brinda indicaciones en tiempo real sobre la tarea que tiene que realizar. 

Este tipo de señales visuales sirven, por poner un ejemplo, para guiar con precisión al trabajador hasta la ubicación de un producto, o para hacer el seguimiento de determinada mercancía, todo ello de forma muy precisa, rápida y sin errores.

Para trabajar con un sistema de realidad aumentada y acceder a esas posibilidades que se abren al combinar el mundo real con el digital, es necesario contar con un software específico y con dispositivos o wearables (cada vez más habituales en almacenes inteligentes) capaces de generar esa experiencia. 

Lo más habitual es utilizar gafas para un resultado más inmersivo, pero también es posible interactuar con las distintas capas de información a través de una tablet o un móvil.

 

5 usos de la realidad aumentada en almacenes

A continuación te comentamos cuáles son algunas de las aplicaciones de las tecnologías de realidad aumentada en almacenes.

 

1. Preparación de pedidos

El picking visual con realidad aumentada es uno de los usos más habituales de esta tecnología.

El trabajador puede visualizar en tiempo real, gracias a la información digital superpuesta en sus gafas, los detalles de un pedido, artículos, cantidades, ruta óptima, etc. El dispositivo lo guía hasta la ubicación exacta de cualquier artículo, facilitando la navegación.

 

2. Optimización del layout

Con aplicaciones de realidad aumentada, es posible mejorar la planificación o distribución del almacén, simulando modelos digitales y colocándolos sobre el modelo del espacio real.

Haciendo ese tipo de simulaciones previas, se evitan movimientos innecesarios, pruebas y costosos experimentos.

La realidad aumentada permite visualizar distintas configuraciones, probar virtualmente su capacidad de almacenamiento y decidir cuál es óptima, antes de llevar a cabo los cambios físicamente.

 

3. Mantenimiento y reparación

Los dispositivos de realidad aumentada pueden ser también una herramienta útil para los encargados del mantenimiento de los equipos, ayudándoles a identificar y evaluar problemas o avisando de qué acciones de mantenimiento es necesario llevar a cabo y cuándo. 

Los técnicos pueden recibir en sus dispositivos una “capa” de información con diagramas de los equipos e instrucciones específicas que agilicen todos los procesos de mantenimiento y reparación.

 

4. Formación de trabajadores

Las operaciones de almacén son cada vez más especializadas y se necesitan trabajadores cualificados. La realidad aumentada es una herramienta útil también para facilitar el proceso de capacitación, gracias a la posibilidad de crear experiencias de formación altamente interactivas, intuitivas y envolventes.

Dado que la realidad aumentada es capaz de recrear escenarios del mundo real, los formadores pueden hacer simulaciones de todos los procesos, guiando a los alumnos a través de operaciones básicas como la preparación de pedidos, la manipulación de equipos y la gestión de inventarios.

De ese modo, se reducen los tiempos dedicados a la formación y se agiliza el proceso de incorporación del nuevo personal, o se facilita que los trabajadores en activo puedan perfeccionar sus habilidades. 

 

5. Más seguridad

La seguridad en los almacenes es de vital importancia. Con operarios manejando maquinaria pesada, mercancía apilada en estanterías altas, tránsito intenso en los pasillos, etc., es necesario extremar precauciones para que no se produzcan accidentes. 

La realidad aumentada también puede aplicarse en este terreno y mejorar los protocolos de seguridad. ¿Cómo? Superponiendo información preventiva, advertencias de peligro y directrices sobre equipos directamente en el campo de visión del trabajador. También, información sobre procedimientos o avisos sobre zonas restringidas.

 

Modernizar tu almacén, nuestro objetivo

La realidad aumentada ha dejado de ser una novedad o un concepto futurista. Es una herramienta más al servicio de la gestión de almacenes, si se utiliza en el escenario apropiado y se implementa adecuadamente, teniendo en cuenta la integración con los sistemas de software existentes y haciendo una correcta estimación de costes.

¿Te gustaría saber si es una solución adecuada para tu proyecto? Te invitamos a que te pongas en contacto con nosotros y consultes todas tus dudas. Te asesoramos sin compromiso.

Marcas de suelo en almacenes: por seguridad y por efectividad

Marcas de suelo en almacenes: por seguridad y por efectividad

Las marcas en el suelo son una forma efectiva de dividir espacios y crear áreas visuales dentro del almacén. Este tipo de señalización se utiliza para delimitar zonas o puestos de trabajo, dirigir el tránsito de personas y maquinaria, señalar peligros o transmitir información de seguridad. Son, por tanto, muy útiles para facilitar la navegación y hacer que el trabajo sea más eficiente.

En este post queremos contarte por qué es importante el marcado del suelo del almacén, cuáles son las formas de señalización más utilizadas y qué aspectos debes tener en cuenta.

 

¿Qué es la señalización de suelos de almacenes y cuáles son sus ventajas?

La señalización de suelos de almacenes es el proceso de marcado de superficies para crear indicaciones visuales de distinto tipo. Las marcas sirven para dividir el espacio, señalar potenciales peligros, delimitar puestos de trabajo, organizar los desplazamientos separando el tráfico peatonal del de vehículos, proteger las zonas de servicio, etc. 

De forma resumida, un sistema de señalización bien diseñado tiene estas ventajas:

  • Promueve la eficiencia del almacén: las marcas en el suelo ayudan a identificar rutas internas o los pasos que debe seguir un determinado proceso, de forma que los trabajadores puedan hacer las tareas con más agilidad.
  • Mejora la organización: Las señales numeradas en el suelo de los pasillos, letras o símbolos para indicar secciones… dividen espacios y facilitan la localización de artículos, son fáciles de ver y no estorban a los trabajadores a la hora de llevar a cabo las tareas. 
  • Aumenta la seguridad: las señalizaciones se utilizan tanto para advertir sobre peligros potenciales como para identificar las rutas de evacuación o las salidas de emergencia. Muchas son reflectantes, para ser útiles incluso en caso de apagón.
  • Dirige el flujo y la velocidad del tráfico: las flechas de señalización, por ejemplo, garantizan que los vehículos se desplazan en la misma dirección por un pasillo, disminuyendo el riesgo de accidente.

La señalización del suelo no es aleatoria, está recogida en la legislación europea y se complementa con la normativa española establecida en el RD 485/1997, donde se especifican los tipos de señalización a utilizar, las distancias a las que deben colocarse, las separaciones recomendadas y otros aspectos.

En cuanto a los colores a utilizar, la norma contiene estas indicaciones genéricas:

  • El rojo indica prohibición o peligro
  • El amarillo indica advertencia o precaución.
  • El azul indica obligatoriedad.
  • El verde indica normalidad, seguridad o autorización.

Como ves, el suelo sirve para mucho más que para caminar. En los almacenes, ofrece una interesante oportunidad para mejorar la comunicación visual, la organización y la seguridad. 

>> Aprende más sobre seguridad aquí: riesgos más frecuentes en el almacén.

 

Los 2 tipos de marcas para suelos más habituales

Existen distintas opciones de marcado de suelos entre las que elegir. Por lo general, cada opción se utiliza en áreas diferentes o para lograr objetivos distintos. Conocer todas las posibilidades disponibles para su uso en un almacén es un buen punto de partida para cualquier estrategia de marcado de suelos.

 

1. Adhesivos de marcaje

Es una de las opciones más populares. Se fabrican con materiales resistentes al desgaste y la abrasión, incluido el tránsito de vehículos. Son antideslizantes, resistentes al agua y a la exposición solar. Tienen una buena adherencia al suelo y pueden durar años, antes de tener que sustituirlos. 

Otra ventaja de utilizar adhesivos es que son asequibles, fáciles de instalar y, en caso necesario, pueden retirarse sin problemas. Por esas razones es probablemente el método de marcaje más utilizado en almacenes.

Hay diferentes tipos. Los más habituales son los rollos de cinta de marcaje, o los adhesivos con formas simbólicas como círculos, huellas o flechas. Por ejemplo, un círculo en el suelo puede indicar el lugar donde colocar algún elemento, mientras que las huellas o flechas señalan la dirección de la navegación o cómo dirigirse a una salida de emergencia.

 

2. Pintura epoxi

Se aplica directamente sobre el suelo de la instalación, y es una opción más duradera que la cinta adhesiva. La pintura epoxi es resistente a los productos químicos y a la abrasión, lo que la hace ideal para su uso en almacenes y otras instalaciones industriales.

Hay que tener en cuenta que suele ser una opción más cara y de aplicación algo más compleja que la cinta adhesiva, ya que requiere más tiempo y esfuerzo.

 

Asegúrate de que tu almacén es eficiente y seguro

Las marcas en el suelo del almacén pueden mejorar el rendimiento a todos los niveles, pero solo si se implementan siguiendo una estrategia. Si no es así, el marcaje puede incluso generar más problemas de los que soluciona.

¿Cómo hacerlo? Pues como cualquier aspecto a mejorar, consultando con los mejores en cada área. En este caso, podemos asesorarte con todo lo relacionado con el layout de tu almacén, para que cada cambio sea el que realmente tu negocio necesita. 

¿Te contamos más? Ponte en contacto con nosotros y te asesoramos sin compromiso.

Qué es un depósito aduanero

Depósito aduanero: qué es y cuál es su utilidad

Un depósito aduanero es un tipo de almacén muy específico utilizado en el comercio internacional. Se trata de un espacio supervisado por las autoridades aduaneras donde es posible guardar la mercancía temporalmente, sin pagar impuestos o aranceles.

La existencia de este tipo especial de almacenes permite que las mercancías puedan permanecer almacenadas y custodiadas hasta que cumplan los requisitos para ser derivadas a su destino final. Eso aporta flexibilidad a las empresas que comercian internacionalmente, ya que les facilita la gestión de la cadena logística y les permite ahorrar costes.

A continuación, te explicamos cómo funcionan y cuáles son sus características. 

 

Qué es un depósito aduanero: esta es su principal ventaja

Un depósito aduanero es una instalación autorizada por las autoridades aduaneras de un país para el almacenamiento temporal de mercancías mientras se realizan los trámites aduaneros correspondientes. 

La ventaja más importante es que la mercancía que se almacena en estos depósitos, que puede ser tanto comunitaria como no comunitaria, permanece bajo un régimen especial de depósito y no paga impuestos de importación hasta que se tramite su asignación a un régimen definitivo. 

Es decir, se puede aplazar el pago del IVA y otros aranceles, que deberán ser abonados para la retirada de la mercancía. 

Eso permite a las empresas gestionar mejor su stock y organizarse estratégicamente para afrontar el pago de impuestos de la manera más conveniente para ellas. 

De forma simplificada, existen dos tipos de depósito aduanero: de titularidad pública o privada. Los depósitos aduaneros públicos pueden ser utilizados por cualquier empresa que lo solicite, mientras que los depósitos aduaneros privados son para uso exclusivo de la empresa propietaria, titular del almacén.

Pongamos un ejemplo para entender mejor la utilidad del depósito aduanero. 

Imaginemos que una empresa española hace un pedido a China de 10.000 unidades de un nuevo modelo de patinete eléctrico. El fabricante hace el envío por vía marítima y, cuando la mercancía llega a puerto, pasa a un depósito aduanero autorizado en la zona portuaria. 

De ese modo, la empresa importadora tiene un tiempo para presentar la documentación necesaria, facturas de compra, detalles de la mercancía y documentación requerida por las autoridades. 

En paralelo las autoridades aduaneras pueden llevar a cabo inspecciones para asegurarse de que los productos importados cumplen con las normativas locales, así como con los estándares de calidad y seguridad.

Cuando las verificaciones estén listas, se inicia el proceso de pago de los impuestos y aranceles correspondientes, paso previo a que la mercancía pueda ser definitivamente liberada y continúe viaje hacia su destino, que puede ser quedarse en el país, reexportarse a un tercero o ser devuelta al país de origen.

En cualquier caso, este tipo de almacén, el depósito aduanero, juega un papel crucial a la hora de facilitar las operaciones comerciales internacionales, por la flexibilidad que ofrece a los importadores y exportadores en términos de planificación logística y fiscal.

 

¿Qué es el régimen aduanero?

Es el conjunto de normas aplicable a cualquier mercancía que pasa por una aduana, en función de la legislación vigente en cada país. En la UE existen 3 tipos de régimen aduanero:

  • De importación
  • De exportación
  • Regímenes especiales

Es en este tercer apartado donde se encuadra el depósito o almacenamiento, que puede ser a su vez de dos tipos: zona franca o depósito aduanero, que es del que nos ocupamos en este post.

 

Otras ventajas que ofrecen los depósitos aduaneros

Además de la flexibilidad para el pago de impuestos, otros beneficios interesantes son: 

  1. Almacenamiento a largo plazo: las mercancías pueden permanecer en el régimen de depósito aduanero hasta un año, antes de decidir su destino final, esto supone una ventaja importante frente al Almacén de Depósito Temporal (ADT), otro tipo de recinto que habitualmente se confunde con el depósito aduanero y cuya limitación temporal es de 90 días.
  2. Facilitación de trámites: las mercancías pueden almacenarse mientras se completan los procesos necesarios para su entrada en el país.
  3. Seguridad aduanera: los depósitos aduaneros están sujetos a un estricto control por parte de las autoridades aduaneras para garantizar que las mercancías almacenadas cumplan con las regulaciones y normativas establecidas. Esto puede incluir inspecciones periódicas para verificar la conformidad y la integridad de las mercancías.
  4. Disponibilidad de stock: muchas empresas importadoras utilizan este tipo de almacén para tener mercancía cerca y poder disponer de ella rápidamente cuando la necesiten. Eso supone una tranquilidad extra, de cara a evitar roturas de stock, y permite dar un mejor servicio al cliente.
  5. Posibilidad de liberación parcial de la mercancía: no es imprescindible retirar toda la mercancía a la vez (pagando las correspondientes tasas), sino que se pueden hacer retiradas parciales, en función de la venta, de forma que el pago de impuestos se haga de forma más equilibrada. 

Debido a estas y otras ventajas, el depósito aduanero es un tipo de almacenamiento estratégico para empresas que se dedican al comercio internacional de mercancías.

 

¿Tienes un almacén? Te ayudamos a sacarle todo el partido

En SCM Logística somos especialistas en la optimización de almacenes. Contamos, además, con una gran herramienta, nuestro SGA TWO, The Warehouse Organizer.

Detectar errores recurrentes, eliminar cuellos de botella, proponer automatizaciones adaptadas a cada necesidad… ¿Quieres mejorar tu almacén? Ponte en contacto con nuestro equipo y te asesoramos sin compromiso.

Empack Bilbao SCM 24

Empack y Logistics & Automation [2024] ¡Ven con nosotros a Bilbao!

En el calendario anual de SCM Logística no puede faltar una cita con el mayor encuentro de profesionales del sector que tiene lugar en el norte de España. Se trata de Empack y Logistics & Automation y tendrá lugar en el Bilbao Exhibition Centre (BEC) los días 28 y 29 de febrero.

Lo último en packaging, logística y transporte se concentrará en dos intensas jornadas, durante las cuales se presentarán las novedades más interesantes para las empresas. Será, además, un punto de encuentro para hacer networking, asistir a conferencias y establecer relaciones comerciales.

Nosotros no nos lo vamos a perder. ¿Y tú? ¡Nos vemos en el stand 2C15!

 

Una ocasión única para expositores y empresas, con tres eventos en uno: packaging, logística y transporte

Un año más, las puertas del BEC de Bilbao se abrirán para acoger un evento imprescindible para las empresas de la franja norte. Por segundo año consecutivo, se reúnen bajo un mismo techo tres ramas de enorme interés para todos los tipos de industria: packaging, logística y transporte.

La organización, que ultima los preparativos, prevé que las cifras de este año van a superar a las de la edición anterior. Se consolida así un evento que el año pasado, en su primera edición con este formato, generó más de 6000 oportunidades de negocio, contó con la asistencia de 2300 profesionales, más de 50 ponentes y 70 marcas.

Será de nuevo una ocasión única para acceder a las últimas tendencias en temas como envases y embalaje, intralogística, automatización, almacenamiento, logística, robótica, transporte y última milla. Todo ello en dos jornadas que concentran tres eventos en uno: 

 

1. Logistics & Automation Bilbao

Es la ocasión para conocer todas las novedades que se han desarrollado en el último año para optimizar la cadena de suministro.

Se podrán ver soluciones para almacenamiento, maquinaria de transporte y elevación, robots de almacén, software de gestión de almacenes, automatización, etc. Habrá posibilidad de contactar con consultores y conocer a las empresas de servicios logísticos más punteras. 

Y todo ello con la posibilidad de asistir a demostraciones en vivo para conocer de primera mano las soluciones propuestas.

 

2. Empack Bilbao

Se trata de una cita para dar a conocer las novedades en tecnología de embalaje y packaging. Está enmarcada en una red europea de eventos, Packaging Portfolio, que desarrolla la empresa organizadora Easyfairs, con el objetivo de impulsar la innovación en esta industria.

Nuevos materiales, embalajes ecológicos, sistemas de medición y pesaje, tendencias en palets, novedades en sistemas de envasado, maquinaria, etc. Lo más interesante del packaging de un solo vistazo.

 

3. Transport & Delivery

Un sector fundamental en la cadena logística es el del transporte. Operadores logísticos, couriers y última milla, software específico para transportistas, aplicaciones en la industria auxiliar, novedades en transporte por carretera, ferroviario y marítimo… 

Esta edición reunirá, un año más, a proveedores y empresas del sector del transporte para presentar sus propuestas y analizar la actualidad del sector.

Además de las exposiciones, también se programarán conferencias con ponentes de alto nivel, habrá una zona de demostraciones y áreas habilitadas para facilitar el networking.

Será una excelente ocasión para tomar contacto con la actualidad de estos sectores, generar nuevas oportunidades de negocio, presentar productos, conocer la actividad de otras empresas, contactar con nuevos proveedores, analizar las tendencias del mercado, etc.

 

No te pierdas lo que vamos a presentar: TWO, el mejor SGA del mercado para almacenes

Si ya sabes quiénes somos y cómo trabajamos, ¡ven a vernos! Nos encantará saludarte. Y si no nos conoces, tendrás la oportunidad de hacerlo como a nosotros más nos gusta: presencialmente. Pásate por nuestro stand y tendremos ocasión de charlar sobre todo lo que necesites para mejorar la eficiencia de tu almacén.

Hoy por hoy, las empresas que gestionan almacenes necesitan incorporar avances que mejoren su competitividad, y en eso podemos ayudarte. De dos maneras:

  • Con nuestra consultoría logística, un servicio especializado en el desarrollo de soluciones adaptadas a cada caso concreto, a cada empresa y a cada necesidad. ¿Quieres mejorar los procesos de tu almacén? ¿Reducir los costes? ¿Aprovechar mejor el espacio? ¿Tener un control total sobre el stock? Ven a vernos y hablemos de ello. Hay soluciones personalizadas para todo lo que puedas necesitar. Puedes consultar algunos de nuestros casos de éxito, con la implantación de sistemas para mejorar la eficiencia logística de almacenes muy diferentes entre sí: Aquarius Cosmetics, Montana Colors, Inoxpa, Mundo Talio, Garcimar o Les Punxes.
  • Con The Warehouse Organizer (TWO), nuestro software de gestión de almacén, un SGA que hemos desarrollado e implementado con éxito en decenas de empresas. Sus mejores cualidades: que es intuitivo y sencillo de manejar, que se adapta a tu empresa (y no al revés) y que puede ampliarse con nuevas funciones cuando tu empresa necesite escalar. Te lo decimos de nuevo: pásate por nuestro stand y te mostramos qué puede hacer TWO por ti y por tu empresa.

¡Recuerda la cita y ven a visitarnos al stand 2C15: 28 y 29 de febrero, Empack y Logistics & Automation en Bilbao! Puedes conseguir tu entrada aquí, así como una Smart Badge con toda la información que necesitas para disfrutar del evento.

Cuándo es momento de ampliar el almacén y qué hay que tener en cuenta

Cuándo es momento de ampliar el almacén y qué hay que tener en cuenta

Cuando la empresa crece, aumenta el número de operaciones y se detecta la necesidad de más espacio de almacenamiento para satisfacer la demanda creciente, quizá ha llegado el momento de pensar en una ampliación del almacén. 

Pero antes, hay que detenerse a planificar cuidadosamente esa expansión. En ocasiones, hay alternativas interesantes que debemos valorar. Y si, definitivamente, decidimos ampliar el almacén, es necesario trazar un plan estratégico para que todo se desarrolle de forma fluida y satisfactoria. 

A continuación vamos a presentarte algunos factores que debes tener en cuenta. 

 

¿Cuándo hay que plantearse la ampliación del almacén?

Ampliar el almacén es una decisión de negocio que requiere un análisis riguroso de la situación, una planificación cuidadosa y un calendario muy preciso. 

¿Cuándo hay que plantearse esa opción?

  • Cuando se detecta un aumento significativo de la demanda. El crecimiento constante y sostenido de la demanda de almacenamiento puede ser una señal. Si las instalaciones están constantemente al límite de su capacidad es hora de valorar la ampliación. 
  • Cuando hay problemas de retrasos de pedidos o necesidad de excesivas horas extraordinarias para sacar adelante el trabajo, a pesar de que se han implementado soluciones para optimizar los procesos.
  • Cuando se detecta una oportunidad de negocio en el mercado y abordar una ampliación estratégica es la vía para hacer crecer el negocio y mantener la competitividad. 
  • Cuando el almacén ha evolucionado hacia nuevas actividades. Muchas empresas han hecho una transición paulatina desde el servicio original de almacenamiento hacia otros servicios que aportan valor añadido, y llegan a un punto en el que las operaciones se complican por falta de espacio.

Generalmente, cuando se da alguna de las situaciones anteriores, u otras similares, lo primero que acude a la mente es la ampliación.

Lo más común es pensar que, con más metros cuadrados habrá más capacidad y menos problemas. Esto es así en líneas generales, pero también es cierto que, en ocasiones, el espacio disponible no está aprovechado al cien por cien y es preferible sacarle todo el rendimiento antes de pensar en una ampliación. 

También es posible que, con una optimización previa de los procesos, de forma que se aumente la velocidad, se gane tiempo y se eliminen errores, se puede evitar o posponer en el tiempo la ampliación de las instalaciones.

Es decir, la ampliación de un almacén es una operación compleja. Es esencial tener en cuenta todos los factores antes de abordarla, evaluando tanto las necesidades empresariales como las opciones disponibles. 

¿Es realmente necesario ampliar? La forma de averiguarlo es hacer una consultoría logística para identificar los problemas y analizar las posibles soluciones.

Y si, después de valorarlo, se decide ampliar, es importante elegir el momento oportuno para asegurar el menor impacto posible en el negocio, y contar con la ayuda profesional necesaria para hacerlo de forma eficiente y sin errores. 

 

Las ventajas de ampliar el almacén

Una ampliación de almacén bien planteada, alineada con la estrategia de negocio, va a constituir una ventaja competitiva importante.

Disponer de un espacio mayor permitirá albergar nuevos procesos y aumentar la capacidad de trabajo. Será una oportunidad de implementar automatizaciones, ofrecer servicios complementarios que requieran una manipulación especializada, adquirir nuevos equipos…

La empresa se beneficiará de un espacio de trabajo mejor acondicionado, más ajustado a sus necesidades actuales y, si el proyecto se ha diseñado correctamente, estará preparada para asumir ampliaciones futuras.

 

¿Y si ampliar el almacén no es la mejor solución?

En ocasiones, es posible que la ampliación no sea la solución adecuada, por ejemplo:

  • Si no es posible adquirir un nuevo espacio al lado de las instalaciones que queremos ampliar
  • Si el equipo con el que se cuenta no es suficiente y no es posible contratar más
  • Si los costes de mantenimiento adicionales son difíciles de asumir… 

No se debe iniciar un proyecto cuyos riesgos puedan desequilibrar el negocio.

Una solución intermedia es asociarse con un operador logístico externo (3PL). Subcontratar algunos servicios puede suponer un importante ahorro, frente a los altos costes de ampliar una instalación o construir una nueva desde cero.

Contar con un socio estratégico es una forma de ampliar la operativa sin hacer una gran inversión inicial, y con capacidad además de negociar tarifas y contar con diferentes centros de distribución para dar mejor servicio a los clientes. 

 

¿Empezamos por un SGA? 

Contar con un software de gestión de almacén o SGA es un paso previo ineludible para sacar el máximo rendimiento a los recursos disponibles. Nuestro SGA TWO es la solución que te recomendamos para hacer un uso óptimo de la instalación, antes de pensar en ampliarla.

Y, llegado el momento de la expansión, también podemos ayudarte a planificar de forma estratégica qué, cómo y cuándo. ¿Te gustaría que lo hablásemos en profundidad? Ponte en contacto con nuestro equipo y responderemos a todas tus preguntas.

Contratar los servicios de un almacén: esto es lo que miran tus potenciales clientes

Contratar los servicios de un almacén: esto es lo que miran tus potenciales clientes

Hoy en día, muchas empresas deciden no tener un almacén propio. ¿La razón? Que es una actividad muy exigente que requiere cada vez más especialización y recursos. La solución para ellas es buscar un socio estratégico, subcontratar el servicio y dedicarse al 100% a su actividad principal. 

Dado que externalizar el almacenamiento es una tendencia en auge, es interesante saber qué es lo que más valoran las empresas a la hora de contratar un almacén. De ese modo, puedes afinar tu oferta y posicionar mejor tu negocio en este mercado.

 

¿Qué factores son los que más le importan a un nuevo cliente?

Para los almacenes que ofrecen servicios a empresas externas, comprender las expectativas de sus potenciales clientes es clave para destacar.

A continuación te decimos cuáles son los 7 factores que más valoran quienes están buscando externalizar el almacenamiento de su empresa. Son los siguientes:

 

1. Ubicación

Para un nuevo cliente, la ubicación del almacén que va a contratar ha de ser estratégica para su negocio. Por un lado estudiará la cercanía geográfica a sus propios proveedores y clientes, para buscar las opciones con menores costos logísticos. Lógicamente, un almacén cercano a los centros de consumo o clientes finales va a agilizar la distribución y entrega de mercancías.

Por otra parte, la proximidad a proveedores clave va a simplificar la gestión de inventario y reducir los plazos para la reposición de mercancías. 

Además, las conexiones con el transporte son fundamentales. Los clientes buscan ubicaciones bien comunicadas, bien por carretera, ferrocarril o incluso puerto marítimo, dependiendo de la naturaleza de sus operaciones.

Los almacenes situados cerca de nudos de comunicación juegan con ventaja, aunque hay muchos más factores que entran en juego en la decisión final del cliente.

 

2. Seguridad

Contar con cámaras de vigilancia, sistemas de control de acceso y alarmas de seguridad, e incluso la presencia de personal de seguridad capacitado, son factores que los clientes valoran.

Pero tomar medidas para la protección de la mercancía no es solo prevenir robos. También es importante reducir otros riesgos, como incendios o daños accidentales. Los almacenes que invierten en seguridad y sistemas de prevención son percibidos como más confiables por parte de los clientes.

 

3. Control de inventario

Contar con tecnologías de seguimiento y gestión de inventario, es otro punto a favor. Los clientes valoran la capacidad del almacén para proporcionar un control preciso y en tiempo real de sus stocks. 

La implementación de tecnologías de seguimiento, como etiquetas RFID (Identificación por Radiofrecuencia) son más que interesantes. Estas tecnologías permiten una supervisión detallada del flujo de productos, desde la recepción hasta la distribución.

 

4. Flexibilidad 

Para mantener relaciones comerciales a largo plazo, los clientes evalúan qué posibilidades tiene el almacén de adaptarse a variaciones en el volumen de inventario. Es decir, si las necesidades de almacenamiento fluctúan en función de la demanda, la estacionalidad, etc., ¿el almacén contratado puede responder?

Esa flexibilidad no se limita al área de almacenamiento, sino también a servicios de valor añadido como empaquetado, etiquetado o personalización de pedidos. La capacidad de adaptarse a los requisitos específicos de los clientes fortalece la relación comercial y mejora la percepción del almacén como un socio estratégico.

 

5. Eficiencia en la gestión logística

¿Se cumplirán los plazos de entrega? ¿Qué tasa de error tiene el almacén en la recepción de mercancías o la tramitación de órdenes? ¿Existen procedimientos de verificación de calidad? Hay muchos factores que definen una gestión logística eficaz. 

Un almacén automatizado, con un sistema de gestión fiable (y aquí tenemos que recomendarte que conozcas nuestro TWO, el SGA desarrollado por SCM Logística), son los más valorados por los clientes, ya que son capaces de garantizar eficacia y agilidad en la gestión logística.

La digitalización de procesos es el paso imprescindible para mantener la competitividad de un almacén. No solo mejora la precisión y velocidad de las operaciones, sino que también permite una mayor visibilidad en tiempo real de los movimientos de inventario, algo que los clientes aprecian.

 

6. Tarifas transparentes

Para una relación de confianza cliente-proveedor de servicios, la transparencia en lo relativo a los costes es fundamental.

Es importante ofrecer una descripción detallada de los cargos por almacenamiento, manipulación, empaquetado, y cualquier otro cargo adicional que pueda aplicarse. Los clientes odian, y con razón, que su factura final incluya costes ocultos o importe sorpresa. 

Ten en cuenta que el cliente necesita hacer su propia previsión de gastos y, por encima de todo, confiar en que su proveedor de servicios facture según lo acordado. 

Otra cosa diferente es ofrecer tarifas flexibles con descuentos en función del volumen, o por contratación de servicios adicionales, etc. Los clientes aprecian la posibilidad de personalizar su contrato según sus necesidades específicas.

 

7. Servicio al cliente

La facilidad y fluidez en la comunicación, así como el servicio al cliente, es un último punto que puede inclinar la balanza hacia un partner u otro. 

Los clientes valoran que sus socios estratégicos sean ágiles respondiendo consultas o aportando soluciones a un problema operativo que surja. Demuestra una buena coordinación interna entre distintos departamentos, así como interés por mantener un alto nivel de calidad en su servicios.

Los almacenes que trabajan su estrategia de marketing juegan con ventaja. Es muy recomendable, entre otras acciones, tener un perfil actualizado en Google My Business y animar a otros clientes a dejar una reseña positiva para ayudar a crear una buena reputación del negocio. 

 

¿Ya sabes qué tienes que mejorar en tu almacén?

Y si no lo sabes, podemos ayudarte a detectar cuáles son los puntos débiles y ofrecerte las soluciones. Solo tienes que ponerte en contacto con nuestro equipo y pedirnos que revisemos tu proyecto.