Inventario fantasma

Inventario fantasma: el misterio del stock desaparecido

¿Qué pasa cuando el sistema de gestión de tu almacén te indica que hay una mercancía disponible y, al ir a retirarla, no está? Sí, eso ocurre a veces. En esos casos hablamos de inventario fantasma, un “agujero” en la gestión que puede hacer mucho daño a tu empresa.

Es uno de esos misterios de almacén que conviene tener bajo control. Hoy vamos a ver qué es el inventario fantasma y cómo puedes evitar llevarte sustos cuando vas a por una mercancía que… ¡se ha esfumado!

 

Qué es el inventario fantasma y por qué es un problema para un almacén

El inventario fantasma es aquel que figura en los registros del sistema pero que no está disponible en las estanterías, es decir, por la razón que sea, no es posible encontrar esa mercancía porque no existe. 

El inventario fantasma es un problema precisamente por eso, porque es… fantasma. Es indetectable hasta el momento en que se necesita. Cuando tenemos constancia de que una mercancía se agota, se puede programar su reposición. El problema surge cuando los registros no tienen datos reales sobre un producto y entra un pedido… 

¿Qué pasa entonces? Pues que el operario, al ir a buscar los artículos, se encuentra con que no hay o las existencias no son suficientes para atender la orden. Y no solo se pierde la venta, sino también la confianza del cliente o el usuario (si se trata de un ecommerce): a nadie le gusta que le primero le digan que sí y luego que no.

Si el almacén forma parte de la cadena de suministro de una factoría, es posible que incluso se llegue a detener la producción. El daño tanto económico como en términos de credibilidad, puede ser importante. 

Otro punto a tener en cuenta es que la existencia de un inventario fantasma altera las estimaciones del almacén. Las métricas o KPI brindan una información importante para hacer predicciones y llevar el control del stock. Si están alteradas o falseadas, se pueden tomar decisiones erróneas. 

De ahí la importancia de tener siempre acceso a datos fiables y actualizados para poder gestionar correctamente un almacén.

 

¿Cómo se puede evitar tener un inventario fantasma?

Hay múltiples razones por las que se puede acabar generando un inventario fantasma. Una posibilidad es que se hayan producido uno o varios robos que no hubieran sido detectados, pero habitualmente se debe a algún tipo de error humano: 

  • registros incorrectos
  • fallos en la reposición de productos
  • inventarios periódicos mal realizados
  • cambios de ubicaciones que no fueron registrados, etc.

Este tipo de errores son propios de sistemas de gestión de almacén inadecuados, generalmente los métodos tradicionales de gestión en papel. Si el control se lleva a mano y con hojas de cálculo, es fácil que el inventario fantasma pase desapercibido. 

El problema es mayor cuanto más grande es el almacén: a mayor número de referencias, más compleja (e inexacta) es la gestión tradicional.

Realmente, hoy por hoy solo hay una forma de evitar estos sustos y todos los problemas derivados, y es implementar soluciones tecnológicas para recoger y procesar la información del almacén. 

Nos referimos a eliminar definitivamente la gestión manual de procesos y dar el salto hacia la digitalización, implementando un software de gestión de almacén que permita trackear las existencias de manera fiable.

¿Cuál sería, entonces, la solución? Depende de las características de cada almacén, pero en líneas generales pasaría por implantar un SGA para llevar el control de toda la logística de almacenamiento. 

Nuestro SGA TWO es uno de los mejores softwares de gestión de almacén que se pueden encontrar ahora mismo en el mercado. Garantiza el suministro para evitar paradas de producción o paradas logísticas, evita errores y retrasos en las entregas, optimiza el espacio y reduce costes de almacenamiento, etc.

Además, tiene la ventaja añadida de que es un software intuitivo, con una interfaz sencilla que los trabajadores aprenden enseguida a manejar. Antes de lo que imaginas, la digitalización de tu almacén será un hecho.

Posiblemente sea interesante implementar otros sistemas de control de las referencias, como por ejemplo implementar etiquetas RFID, con seguimiento por radiofrecuencia, para garantizar la trazabilidad de la mercancía.

Con este sistema, no es necesario hacer lecturas artículo por artículo, acercando manualmente un dispositivo (como ocurre, por ejemplo, con los lectores de código de barras). Simplemente se instalan lectores en lugares estratégicos que captan la información de las etiquetas incluso estando paletizadas.

 

Mejora la gestión de inventario en tu almacén y olvídate del stock fantasma

Si no quieres más misterios en tu almacén, tienes que avanzar en una gestión digitalizada para llevar un control de datos riguroso.

Y en eso podemos ayudarte, solo tienes que ponerte en contacto con nosotros y te ofrecemos soluciones adaptadas a las necesidades de tu empresa. Hablamos cuando tú quieras.

Análisis ABC inventario almacén

Método ABC: gestión de inventario

El método de análisis ABC es uno de los más utilizados para gestionar almacenes porque consigue un alto nivel de eficiencia. ¿Sabes en qué consiste? Hoy te lo vamos a contar.

En el día a día de un almacén es fundamental conseguir que el tiempo de desplazamiento de operarios o equipos automáticos sea el mínimo posible. Dicho de otra manera, cuando más lejos haya que desplazarse para depositar o retirar un artículo, más tiempo se tarda y menos eficiente es cada movimiento. 

El sistema de análisis conocido como ABC agrupa los artículos en 3 categorías, según el valor que aportan a la empresa. Es decir, da prioridad a los productos con los que la empresa gana más. Clasificar la mercancía en función del valor que aportan y distribuirlas con ese criterio, es una forma de mejorar el rendimiento general del almacén.

¿Suena bien? Sigue leyendo, que te contamos más. 

 

Por qué el análisis ABC de inventarios funciona: 5 beneficios

Los tiempos de desplazamiento dentro del almacén son uno de los factores que más pueden comprometer la eficiencia, ya sea en un almacén manual, semiautomático o completamente automatizado. 

De hecho, se estima que el desplazamiento de trabajadores o robots de picking constituye más del 50% de la jornada laboral. La distancia y el tiempo siempre son factores críticos. 

¿Y si hubiese una manera de almacenar los productos de forma que se minimicen los desplazamientos? 

El análisis ABC es un método para clasificar el inventario dividiendo los productos en tres categorías con el fin de optimizar la disposición del almacén y ganar eficiencia en cada movimiento.

Se basa en la regla 80/20 o Ley de Pareto, según la cual el 80% de los resultados se logran con la aplicación del 20% de los recursos o esfuerzos. 

Trasladado a la logística de almacén, significa que el 80 por ciento de las ventas son generadas por alrededor del 20 por ciento de los productos. Por tanto, parece razonable clasificarlos en función del beneficio que aportan.

Siguiendo este sistema ABC para clasificar todo el inventario, tendrías que designar una letra a cada tipo de producto, con este esquema:

  • La A es para los productos que representan el 80% del movimiento del almacén, y que suponen alrededor del 20% de las existencias.
  • La B son aquellos productos que representan el 15% del movimiento, y alrededor del 30% de las existencias.
  • La C clasifica productos con solo un 5% de movimiento en el almacén, y que suponen un 50% de las existencias.

Una vez tengas identificados los productos de cada categoría, verás que en tu almacén hay mercancías más y menos estratégicas. 

El siguiente paso es implantar realmente el sistema de inventario ABC y la reorganización del almacén.

 

Los 5 principales beneficios del sistema ABC

¿Qué vas a mejorar con este sistema? Como mínimo, estos 5 puntos:

  1. Gana eficiencia: al reorganizar el almacenamiento todos los procesos mejoran. Los recursos de un almacén son limitados. Identificando la parte del inventario más valiosa y con más alta demanda, puedes enfocar el mayor esfuerzo en aquello que va a aportar más valor a tu empresa.
  2. Controla el stock: el control del stock es uno de los mayores desafíos de un almacén. Por eso, tener un indicador que señala cuáles son los productos más prioritarios permite centrar en ellos los mayores esfuerzos para prevenir roturas de stock y tener siempre disponibilidad de mercancía.
  3. Mejora la productividad: reorganizar tu almacén con el sistema ABC permitirá acceder con más facilidad y en menos tiempo a los productos más demandados. 
  4. Aumenta la satisfacción de los clientes: identificar los artículos más rentables permite crear estrategias para ofrecer mejores condiciones de forma selectiva. Además, al mejorar la operativa de almacén, los pedidos se preparan a más velocidad y se expiden en plazos más breves.
  5. Reduce costes: todos los puntos anteriores implican un mejor control del presupuesto y una reducción de todos los gastos de la empresa. 

 

Claves para hacer un análisis ABC

El análisis y posterior categorización de los productos de un almacén puede hacerse basándose en distintos parámetros, según convenga en cada caso particular.

  • Por rotación: se identifican las existencias con una mayor demanda y, por tanto, mayor rotación, y se clasifican como A, y estarán bajo un control de inventario permanente. Las de menor rotación serían C.
  • Por coste o valor: los productos A son aquellos con mayor coste por unidad y los C los de menor coste. Este método de clasificación es más apropiado para almacenes con productos de un rango de precios muy amplio.
  • Por una combinación de rotación y valor: es el criterio más completo, según el cual los productos categorizados como A son los de más valor y mayor demanda; en el extremo contrario estarían los C.

En almacenes muy grandes, divididos en áreas distintas, se puede incluso aplicar este sistema de clasificación por zonas, para mayor eficiencia.

 

Cómo tener el control total del inventario

Un control de inventario exhaustivo y eficiente tiene que ir de la mano de la tecnología. Existen distintas formas de gestionar un inventario, pero todas ellas pasan por implantar un software de gestión del almacén que permita tener acceso a la información relevante en cualquier momento. 

¿Te gustaría tener el control total del stock de tu almacén, sin sustos? Podemos ayudarte con eso. Ponte en contacto con nuestro equipo y pregunta por nuestro SGA TWO. Seguramente es la solución que estás buscando para que tu almacén crezca.

Importancia inventario gestión de almacén

La importancia del inventario en la gestión de almacén

Para tener el control total de un almacén es necesario cada cierto tiempo hacer un inventario y actualizar los datos sobre existencias y sus ubicaciones.

Porque, aunque tu sistema de verificación esté optimizado, no basta con eso. Es necesario detenerse para hacer un inventario físico de la mercancía para contrastarlo con los registros de la empresa: qué productos hay en el almacén, en qué cantidad y cuáles son sus características.

Es un proceso que se debe realizar por muchas razones, veamos cuáles.

 

Razones por las que es importante hacer inventario

Lo primero que hay que tener en cuenta es que toda empresa tiene la obligación legal de hacer un inventario de sus existencias, para cuadrar el inventario físico y el inventario contable.

Por ese motivo, es habitual que la fecha para hacer el inventario se programe coincidiendo con el final de ejercicio.

Es decir, a 31 de diciembre todas las empresas necesitan conocer con exactitud cuánta mercancía tienen en el almacén. Con esa información pueden regularizar las existencias, cerrar el balance y hacer la cuenta de resultados. 

La obligatoriedad legal es, sin duda, el argumento definitivo para hacer inventario, pero para una empresa no debe ser la razón principal.

Somos conscientes de que, en muchos casos es un proceso molesto, ya que requiere movilizar personal y detener la actividad en muchos casos. Pero es importante comprender que el inventario es necesario para estimar correctamente el valor de la empresa.

Además, el inventario sirve para examinar la calidad del control del stock durante todo el año.

¿A qué nos referimos? 

A que si el resultado obtenido en el inventario físico se desvía poco (¡o incluso nada!) de los datos que hemos recogido con los métodos de control habituales, podremos concluir que nuestro sistema de control funciona.

También puede ser que se produzcan diferencias relevantes. En esos casos es importante analizar lo que ha ocurrido. 

Puede haber motivos de muy distinta naturaleza: robos en el almacén, errores cometidos por los trabajadores, fallos administrativos, operaciones pendientes de registro, cambios de referencias…

Un inventario sirve para detectar problemas de muy distinta índole y poner las soluciones.

¿Te gustaría saber más sobre sistemas de gestión de almacén? Lee aquí cuáles son las diferencias entre SAP WM y SAP EWM. 

 

Tipos de inventarios según la periodicidad

Es la clasificación más habitual, aunque existen otras en función de la necesidad logística, el momento en el que realice el inventario, la naturaleza de la mercancía (materias primas o productos terminados), etc. 

En este caso, teniendo en cuenta la periodicidad, hablamos de: 

 

Inventario permanente

Consiste en llevar el control día a día, de manera muy precisa y exhaustiva, controlando cada entrada o salida de mercancía.

Puede realizarse con registros en listados si el almacén es pequeño o incluso mediano, pero muchísimo más fiable es la implantación de un SGA para gestionar el stock del almacén. Este software proporciona información actualizada y en tiempo real de las mercancías almacenadas.

 

Inventario periódico

Consiste en realizar el inventario físico, al menos una vez al año. En muchos casos, se programa cuando se cumple el final del ejercicio y recibe el nombre de inventario final. Mientras dura el inventario se detiene la actividad del almacén para poder realizar un recuento exacto de las existencias.

Pero también pueden realizarse inventarios con menor periodicidad, según las necesidades del almacén.

Incluso pueden realizarse inventarios rotativos en varias ocasiones a lo largo de un mismo ejercicio. Suelen programarse al terminar una campaña importante (por ejemplo, después de Navidad) o después de un pico de demanda imprevisto.

Este tipo de inventario suele ser más frecuente en almacenes con una gran rotación y un bajo nivel de digitalización. 

En esos casos, la mercancía permanece poco tiempo en el almacén y el inventario permanente puede resultar complicado en exceso. Un ejemplo podría ser la industria agroalimentaria tradicional. 

No obstante, conviene señalar que existen soluciones digitales a medida para optimizar cualquier tipo de proceso y en cualquier tipo de almacén. Mantener el control permanente del inventario es posible utilizando las tecnologías adecuadas y adaptándolas a cada caso. 

 

Cómo un SGA puede ayudarte con el inventario de tu almacén

Es verdad que todavía muchos almacenes pequeños y medianos confían el control de su stock al papel y a los procedimientos manuales, es decir, el operario llevando la cuenta en una hoja de papel que luego se ha de pasar a una hoja de Excel.

Puede funcionar, aunque con un alto riesgo de error, en almacenes reducidos, pero su eficacia es limitadísima.

En cuanto aumenta un poco el número de referencias y de operaciones, es necesario tener un Sistema de Gestión de Almacén que permita mantener un control máximo con un sistema de inventario permanente.

Además, puede integrar sistemas de identificación de la mercancía para facilitar enormemente el proceso. Nos referimos al clásico código de barras o, más avanzado, un sistema de identificación por radiofrecuencia.

Para saber más, lee este post sobre etiquetas logísticas para almacén: código de barras vs. RFID. 

 

¿Cuál es la mejor manera de hacer inventarios en tu almacén?

Para conocer el stock exacto de tu empresa y tener la información real para tomar decisiones comerciales, el inventario es una tarea importante.

Ahora bien ¿cuál es la mejor manera? ¿Te conviene implementar un SGA para realizar un control permanente del stock? ¿Cómo encajaría en tu empresa?

No te quedes con esa duda (ni con ninguna otra). Ponte en contacto con nosotros y te daremos soluciones a medida.